Empezaremos situándonos en el Medidor emocional y después escucharemos el Evangelio del domingo para reconocer cómo nos sentimos y ver que desde Jesús, siempre hay una respuesta a cualquier de las circunstancias que estemos viviendo. Por lo tanto: Tómate un momento, respira tranquilamente y respóndete… ¿La emoción que siento en este momento es agradable o desagradable? ¿Cómo es mi energía? ¿Ahora, mira el Medidor y sitúate en el cuadrante que responda a estas dos variables? Dejamos unos segundos… Lectura del Evangelio del pasado domingo: “En aquel tiempo, cuando salía Jesús al camino, se le acercó uno corriendo, se arrodilló ante él y le preguntó: «Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna?». Jesús le contestó: «¿Por qué me llamas bueno? No hay nadie bueno más que Dios. Ya sabes los mandamientos: no matarás, no cometerás adulterio, no robarás, no darás falso testimonio, no estafarás, honra a tu padre y a tu madre». Él replicó: «Maestro, todo eso lo he cumplido des...