MIércoles, 21 de mayo
Empezaremos situándonos en el Medidor emocional y después escucharemos el Evangelio del domingo para reconocer cómo nos sentimos y ver que desde Jesús, siempre hay una respuesta a cualquier de las circunstancias que estemos viviendo.
Por lo tanto: Tómate un momento, respira tranquilamente y respóndete…
¿La emoción que siento en este momento es agradable o desagradable? ¿Cómo es mi energía?
¿Ahora, mira el Medidor y sitúate en el cuadrante que responda a estas dos variables?
Dejamos unos segundos…
Hágase en mí
En tiempos de bonanza y alegría,
cuando estoy rebosante de vida,
yo también digo:
hágase en mí.
Cuando no veo claro el camino,
y no me encuentro a mí mismo,
oro e insisto:
hágase en mí.
Cuando me siento con ánimo y fuerzas
y vivo con gozo en tu presencia,
no olvido:
hágase en mí.
Cuando todo se vuelve cuesta arriba,
y nada en este mundo me motiva,
tres palabras repito:
hágase en mí.
Como María en cada momento
yo también, Señor, te digo:
hágase en mí.
(Fermín Negre)
Y escuchamos la canción: DIJISTE SÍ.