Lunes 27 de marzo


Hoy una historia:
El alumno, según él, había terminado el cuadro. Llamó a su maestro para que lo evaluara. Se acercó el maestro y observó la obra con detenimiento y concentración durante un rato.
Entonces, le pidió al alumno la paleta y los pinceles. Con gran destreza dio unos cuantos trazos aquí y allá. Cuando el maestro le devolvió las pinturas al alumno, el cuadro había cambiado notablemente. El alumno quedó asombrado; ante sus propios ojos la obra había pasado de mediocre a sublime. Casi con reverencia le dijo al maestro:
-  ¿Cómo es posible que con unos cuantos toques, simples detalles, haya cambiado tanto el cuadro?
-   Es que en esos pequeños detalles está el arte. Contestó el maestro.
 
Hoy, Señor, en nuestra oración de familia te decimos:
Gracias por los detalles que tienen con nosotros, por las personas que nos dedican tiempo, sonrisas, consejos, un sencillo WhatsApp que nos anima.

Por quienes hacen que nuestra vida sea más plena y feliz, gracias Señor