Miércoles, 25 de septiembre

Empezaremos situándonos en el Medidor emocional para reconocer cómo nos sentimos y después continuaremos con la oración como respuesta a lo que vivimos.


Por lo tanto: Tómate un momento, respira tranquilamente y respóndete… 

¿La emoción que siento en este momento es agradable o desagradable? ¿Cómo es mi energía?

¿Ahora, mira el Medidor y sitúate en el cuadrante que responda a estas dos variables?


Dejamos unos segundos…


En nuestra oración de hoy, damos gracias a Dios por habernos creado a cada uno de nosotros de manera única, pero todos, todos, con una semilla de Dios en nuestro interior que nos hace Iguales.