Jueves, 29 de mayo
Buenos días. Hoy en nuestra oración de familia decimos a cada una de nuestras madres. “RECUERDO…” _ Que no sabías conducir un coche, y aprendiste para llevarme al colegio. _ Que el dentista siempre me premiaba con libros de cuentos que le habías dado a su ayudante. _ Que tu presupuesto siempre se estiraba un poquito más, si yo deseaba más que nada en el mundo aquellos zapatos nuevos. _ Que "solo por esa vez" ordenabas una y otra vez mi desordenado dormitorio adolescente. PERO NO RECUERDO… _ … Un solo momento en que no contara con tu apoyo. No con tu aprobación, porque hemos discrepado muchas veces. _ … Haber estado nunca solo; siempre esperabas para amortiguar mi caída y celebrar mi éxito. _ … Que estuvieras demasiado ocupada para escucharme, ni demasiado cansada para ayudarme, o demasiado preocupada con tus problemas para no comprender los míos, o demasiado seria para reírte conmigo. Gracias, Padre Dios, por cada una de nuestras madres.